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«Why is it you whisper
When you really need to yell
Troubles in tow
Go wisely and slow»

Wisely and Slow, The Staves

Listening Devenire, Jeremy Limb, (The minimal piano) tras el regreso de Vieaux Bocau

Hoy quiero compartir 3 reflexiones en forma de dualidades que me rondan por la cabeza desde hace dos semanas y que ocupan algunas notas en cada uno de mis dispositivos móviles (cerebro, corazón y celular). Son 3 reflexiones que creo que debería plantearme en cada situación que requiera algún tipo de decisión inmediata en mi vida. Por ello intentan ser sencillas a modo casi de encuesta. Es algo así como mi particular back to basics para la toma sensata y coherente de decisiones en el día a día. Por supuesto está muy asociada a quién soy ahora, por lo que es algo personal.

Las 3 tienen que ver con nuestra capacidad de disfrutar la vida y disfrutarnos. Las 3 son, a mi modo de ver, reflexiones progresivas. Es decir, no podemos acceder a resolver una sin haber resuelto la anterior. Ninguna de las 3 es absoluta ni cada elemento de la dualidad es bueno o malo, simplemente es posible o debe pesar más que el otro en según qué circunstancia. La excelencia en las personas no es más que una media constante de elecciones acertadas en función de los contextos.

Ahí van 😉

MALDICIONES PREVIAS

Malditos aquellos que deciden qué quieren hacer antes de decidir quién quieren ser, porque ninguna casa se levantó sin los cimientos. Malditos aquellos que dedican todo su esfuerzo a convencer a los demás, porque viven el silencio de sí mismos. Malditos los que quieren estar en otro lado o momento diferente a AQUÍ y AHORA, porque sobreviven a sus oportunidades sin apenas divisarlas. Malditos los que adoran la casualidad, porque para ellos todo está justificado. Malditos aquellos que deciden no estar listos para otros, porque jamás encontrarán consuelo. Malditos los que luchan por cambiar el mundo, porque convierten cada instante en un campo de batalla.

PRIMERA DUALIDAD titulada A QUÉ DEDICO MI ESFUERZO EN CADA MOMENTO DE MI VIDA:

Soy convencedor de otros O Soy conocedor de mí mismo

(me esfuerzo en construir una influencia sobre otros o en estar satisfecho con lo que soy)

 

AHORA Y LO QUE SOY

He tragado colecciones enteras de polvo de varios sabores diferentes. He gastado bidones de tinta de cien colores solo para llegar a este momento. Y pienso disfrutarlo.

Vivo cada día con una previsión de esperanza mínima. Low budget diría mi amigo Liher. Desde hace poco mis grandes sueños son muy inmediatos. Me sacudí algunos restos de mí mismo en el camino hacia mis propios huesos. Abandoné convencido mi lucha por cambiar el mundo. Aprendí que la cantidad de conflictos internos que debes resolver dentro de ti es directamente proporcional al tamaño de conflictos que quieres resolver ahí fuera. Mira dentro de ti. En ningún otro lugar encontrarás una respuesta que pueda apaciguarte.

La mayor parte de personas se parecen a una compañía minera permanentemente en huelga. Se niegan diariamente a explotar la mayor veta de riqueza. No descienden a sus profundidades. Este es su dilema doloroso: estar seguros o ser felices. Viajar solo me hace darme cuenta de que no puedo moverme de mí mismo. Esto es todo lo que soy. Este que escribe es el único eje, las llantas, las ruedas, las cadenas. Puedo pinchar cada cierto tiempo, pintarme de colores, pero el cuadro sigue siendo el mismo. Voy conmigo a todas partes pero en mi vida no siempre he tenido preferencia.

De pequeño lloraba antes de dormir. Tenía miedo de un monstruo peludo y rápido que amenazaba mi tranquilidad aprovechando la luz muerta. Cansados de depredar a todas las especies, decidimos comernos a nosotros mismos y al planeta. Escapamos de las realidades inmediatas. Huelen y saben y no estamos acostumbrados a probar nuevos sabores. Buscamos el consuelo en la certeza y construimos ilusiones de moral.

Desde hace poco algo en mí se ha activado. Tiene que ver con dejar de vivir desde los otros y comenzar a vivir desde mí mismo. Conocerme está siendo la mayor aventura de mi vida.

SEGUNDA DUALIDAD o A QUÉ DEDICO MI TIEMPO EN CADA MOMENTO DE MI VIDA:

Vivo aquí y ahora O Muero esperando vivir otro momento.

(tomo control de mi vida o intento cambiar algo que no está en mi mano)

 

LA VERDAD Y POR QUÉ NO ES IMPORTANTE

Se diría que no existe otra alternativa a la verdad. Pero jamás ha ocurrido esto. Al cabo del día la mayor parte de situaciones a las que te enfrentas no se resuelven utilizando la verdad. Tampoco a lo largo de la historia la mayor parte de líderes conocieron toda la verdad y a pesar de ello tomaron decisiones. La Verdad, antes conocida como Dios, no me parece ahora muy fiable como punto de partida. Expongo motivos en tres párrafos.

No suele haber consenso sobre qué es la verdad y quienes son sus portadores. Y sin embargo todos la empleamos como arma arrojadiza. En equipos es frecuente encontrar lo que yo denomino actitudes de trinchera. Son comportamientos y hábitos adquiridos que dificultan a las personas llegar a un entendimiento y las obligan a situarse frecuentemente no en relación a otros, sino contra otros. En los casos más acusados, las personas llegan a luchar contra sí mismas a nivel de acciones y discursos. La eterna lucha por la búsqueda de «la verdad» es inherente al ser humano pero la obsesión por encontrarla puede causar estragos a menudo irreparables. El lema «aunque parezca mentira, vivir» me acompaña desde niño. Mis grandes referencias son personajes literarios y creo en el enorme poder sugestivo y motivador de la ficción. Respeto más al Barón de Muchausen que a sir Isaac Newton. De hecho no suelo respetar la mayor parte de verdades por defecto, antes bien las cuestiono porque ese ejercicio continuo me parece mucho más edificante. Probablemente tiene que ver con que lo que consideramos «la verdad» es más un proceso flexible y causal que un hecho inamovible y arbitrario. La verdad para mí es algo muy común pero invisible. Muta y depende del contexto. Por mi parte tengo claro que no puedo aplicar el mismo sistema común de coordenadas para la construcción de un tren que para la comprensión del universo. La ingeniería nunca es suficiente, aunque ayuda.

Me ocurre lo mismo una y otra vez. Algunas personas creen trabajar o vivir sobre la verdad. Dicen que el resto no la tienen o no la dicen. Se trata de una tesoro preciado que todos creemos poseer. Hasta el punto de convertirse en un terrible mecanismo de defensa. La verdad que fabricamos nos impide ver la verdad que otros comparten. Las palabras «objetivo», «oficial», «universal», «absoluto», «natural», «normal» o «científico» nos ayudan a fabricar esta fachada que frecuentemente intento derribar. Desde luego no se trata de relativizarlo todo pero sin duda tampoco de abolir por completo el pensamiento crítico. Lo más sano parece ser situarse en posiciones intermedias. Por otro lado, la vida sin filtros sale cara. Tenemos pruebas de ello a diario. Porque somos animales de conciencia. Cualquier convicción que defienda que compartir por completo lo que uno piensa es siempre positivo (para ti y para otros), tiene una gran contrarreplica en un filme que esta noche he descubierto.

En la genial película The invention of lying (Gervais, 2009) los personajes viven en un mundo donde no existe el concepto de mentira. La sinceridad total e inmediata es el único medio para relacionarse. Las personas se casan por genética y el amor es una ficción impronunciable. No hay lugar para ningún juego más allá de la desagradable traición de nuestros pensamientos. Algunos diálogos realmente edificantes ilustran lo que sería de nosotros si todos pudiéramos decir lo primero que se nos viniera a la cabeza. Las metáforas y las cartas de amor perderían su sentido; nadie leería cuentos y los sueños serían enfermedades evitables. No habría religión ni sistemas de pensamiento tal y como los conocemos. Ninguno de ellos se construyó sobre certezas. Nadie podría fabricar una esperanza para cada uno de nuestros más callados miedos. Un mundo racional y seguro pero altamente aburrido, gris e indiferente.

TERCERA DUALIDAD o QUIÉN SOY EN CADA MOMENTO DE MI VIDA:

Soy la verdad e intento conocerla/conocerme O Soy el que intenta conocerse/conocerla en otros

(quiero ser protagonista de mi vida o un mero espectador)

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