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burocracia VS conversación

burocracia VS conversación

Cuando hablamos de dirección por objetivos, ¿Es posible que nuestro objetivo sea no tener ninguno o simplemente necesitar espacio y tiempo para poder buscarlo? Contradiciendo a Anibal Smith, el capitán del Equipo A, ¿Acaso puede ser parte de un plan no tener un plan? ¿Podemos vivir o trabajar no teniendo un plan completo y absoluto sino simplemente pequeñas coordenadas? Cuando el peso inmenso del mecanicismo y la inercia social generan burocracia hasta en tu propia vida, cuando todos los ejes deben estar continuamente en movimiento (conectados, a punto, aparentes) y sobre todo cuando sientes que ni siquiera te permites respirar ¿existe alguna alternativa respetable? Como diariamente leéis en este blog, desde la iniciativa creemos que desde luego que sí y que existen múltiples formatos exitosos (arte, lean, agile,…)

En la película The giant mechanical man (Kirk, 2012) asistimos al encuentro de dos personas que se niegan a tenerlo todo absolutamente claro. No es que rechacen la estabilidad sino que tienen una forma distinta de entender qué es una vida estable y cómo pueden ser felices. En esta magnífica historia estar perdido o sentirse invisible para el resto son tan solo los primeros pasos de un camino hacia un futuro donde sentirse apreciado y especial. Aparentemente en esta película ninguno de los protagonistas tiene trabajos «respetables» para la sociedad, pero la película no trata de eso. Trata de que por sí mismas estas dos personas son capaces de ennoblecer cada profesión que desempeñen. Respeto enormemente el potencial inmenso de generación de valor real de estas personas. No tienen planes de carrera definidos porque sencillamente no corren por las mismas calles que los atletas de negocio que todos conocemos. Se han conocido y han conversado, han aparcado el ritmo de sus vidas para alejarse de la autopista impuesta de la burocracia. Hablamos, sin duda, de otra dimensión.

 

AAAAgiant

Uno de mis blogs de referencia en management exponía hace poco de forma muy concisa las teorías a favor y en contra de la burocracia enunciadas respectivamente por Weber y Merton. Lo que resulta indudable es que a menudo los sistemas que creamos nos acaban devorando poco a poco hasta perder la perspectiva. Resulta complicado explicar a veces cómo aquello que creíamos indudable no lo es tanto. En la mayoría de teorías sobre el management, en muchos de los pensamientos que ahora damos por válidos, echo de menos un componente necesario de locura, de aparente caos impredecible y de gestión de lo incompleto. Porque aunque sabemos que en teoría «todo debería funcionar», también sabemos que casi nunca nada es perfecto o funciona por completo.

Cuando elaboramos un plan de negocio, cuando realizamos una previsión, cuando defendemos un discurso o nos posicionamos en una conversación, a menudo la base de nuestro sentido es la PERFECCIÓN. Pero es también nuestra mayor huida hacia delante. Porque nos han enseñado que 1 + 1 siempre daba 2, que si durante toda tu vida estudias y trabajas duro siempre tendrás el mejor de los posibles resultados. Nos lo han enseñado, sí, pero en este momento nadie en su sano juicio se atreve a defenderlo. Porque tenemos circunstancias y porque formamos parte de un sistema vivo (equilibrado e inestable, caótico y controlado) Cuando desde la iniciativa hablamos de modelos de abiertos, de la necesidad de trascender la masa (el número, el volúmen, la cantidad, la cifra), cuando exteriorizamos que es necesario personalizar cuando trabajamos con personas (¡siempre!) es frecuente encontrarnos con sistemas, con líderes y con organizaciones que perdieron la noción real del valor de las personas. Necesitamos hoy, cada vez más fuerte y diligentemente reconocer que no somos perfectos. Que tal vez reconocerlo sea lo perfecto. Necesitamos hablar dentro de las organizaciones y en nuestros equipos. La herramienta de transformación más poderosa que jamás he utilizado se llama CONVERSACIÓN. Porque el animal social que eres no lo es porque tengas una cuenta en facebook, foursquare, twitter, whatsapp, linkedin,… sino por relacionarte y desarrollar tu vida en tu contexto.

Hace algunos meses hablé del constante empeño de la gente por clasificarme en una caja en las que ellos se sientan cómodos, y de mi mayor empeño aún en desarrollar mis habilidades y aptitudes en una caja (o no) que yo decida. Esto tiene que ver con conceptos que son necesarios como medio para convivir pero que entendidos como fin último me resultan tremendamente insoportables. Sobre todo tres de ellos especialmente dañinos: «competencia técnica», «previsión» y «estándar». Todas las empresas de corte burocrático que he conocido se identifican siempre porque parten de un supuesto que incluye en su definición los anteriores tres conceptos: «El comportamiento de todos los miembros de una organización estándar, con sus correspondientes competencias técnicas y especialidades, es completamente previsible» Por eso la mayor parte de estas organizaciones promueve una cultura basada en tres pilares: planificar, planificar y planificar. Lo malo de estos tres pilares es que la proyección de una idea nunca será equiparable o útil sin una experimentación continua por medio de la acción.

Básicamente, hablando claro, si hemos llegado hasta aquí es porque hay mucha gente detrás que se ha equivocado. Mucha más, sin duda, que la gente que acabó acertando. Esto vale en cualquier ámbito de la vida pero más aún en nuestros entornos de trabajo. Aclaración básica: El miedo a la entropía, mata. Personalmente amo los sistemas, soy un completo fanático de ellos y creo que necesitamos sistemas, creo que lo somos y creo también que todo aquello que creamos (empresas, proyectos,  ecosistemas) es por naturaleza y apriori algo vivo. Nuestro amigo Iñaki Velaz destacaba los cuatro elementos básicos de cualquier sistema: entradas (inputs), proceso (throughput), salidas (outputs) y el que sin duda más solemos descuidar retroalimentación (feedback). Esto se debe en mi opinión a que cada una de estas fases del ciclo de la vida de un sistema son progresivas pero a que es realmente complejo encontrar un sistema con un ciclo de vida realmente maduro. Los expertos lo llaman cadena de valor.

En mi propia vida, esto es aplicable a la metáfora del buen conversador: Todo el mundo sabe recibir alguna entrada (escuchar algo con un mínimo valor), muchos saben generar un proceso (pensar algo que responder), unos pocos saben concretar ese valor (hablar con propiedad) pero realmente muy pocos saben conversar (recibir y aportar feedback continuo). Realmente conozco a muy pocos buenos conversadores (aquellos que saben completar el ciclo) y a una gran cantidad de personas aceptables en una o dos de estas fases (buenos pensadores o personas que sepan escuchar o personas que sepan hablar) Pero realmente saber conversar y mantener un diálogo constructivo y eficaz está al alcance de muy pocos. Puede que sea lo que más admire y respete de una persona a la hora de determinar si es o no respetable. Desde la antigüedad los sabios han considerado el dominio y la práctica de la conversación como uno de los mayores grados de civilización posibles.

Personalmente opongo, por tanto, la actitud burocrática (impositiva, exclusiva, inflexible y teórica) a la actitud conversacional (democrática, inclusiva, flexible y práctica). Lo que para mí representa la burocracia tiene que ver con el artificio de las cosas. Lo que para mí representa la conversación tiene que ver con la naturaleza y el sentido común de las personas. No me cabe ningún duda: la conversación es la mayor y más tangible forma de rebeldía humana. Tenemos ejemplos de ello en la Historia y en la formación de todo tipo de regímenes y estructuras totalitarias. A La barbarie de la ignorancia de George Steiner se suman El elogio de la lentitud de Carl Honoré (con el que espero compartir aventuras en breve). Dos enfermedades graves de rabiosa actualidad: el tiempo y el silencio. Dos remedios milagrosos: ser el tiempo que nos queda por vivir (como decía Josep Soler) y educarnos en el noble arte de conversar.

we are infinite

we are infinite

adole

«Cada hombre es lo que hace con lo que hicieron de él»

inhumano Jean Paul Sartre

 

Me encanta la vida, estoy sobre todo enamorado de ella. Jamás me ha dejado fuera. Nunca me abandona y nunca la he abandonado. Siempre confió en mí. Te garantiza desde el inicio que habrá un único expediente de regulación o tal vez un gran despido pero solo después de un largo viaje. Tuve momentos realmente complicados, momentos maravillosos de placer y de dolor y siempre estuvo no a mi lado sino en mí. Sentía realmente que yo era ella y que ella era yo.

Y sin embargo ahora todo lo que nos queda es un miedo pavoroso a ser nosotros mismos, a apostar sin dilación por aquello que queremos ser sin garantías, simplemente un miedo a equivocarse, a rechazar aquello que nos anula y hace de nosotros pequeños pedazitos de constancia. Si volviera a nacer seguramente acabaría siendo el mismo, lo que sea que eso signifique. Pese al fracaso y al éxito, muy lejos del mundo que heredé, intentando escribir mi mundo propio, rebelándome e invirtiendo en rebelar a otros. Mark Twain dijo una vez «Cualquier hombre con una idea nueva es siempre un loco hasta que la idea triunfa«.

He cometido tantos errores y tan graves que todos ellos pasaron desapercibidos para otros. Parecían parte de mí y de mi sueño. En todos esos errores, incluso en estos últimos meses y semanas, creía siempre que hacía lo correcto. No confiaba en el proceso sino en las personas, no trabajaba por alumbrar enormes teorías sino por mantenerme cerca del sentido común y de la naturaleza de las cosas. No lo conseguí innumerables veces, no lo voy a conseguir otras tantas más. Mi cultura es tristemente marginal, en todas mis conversaciones hablo de lo mismo. He conseguido alcanzar la gloria en momentos de dispersión y foco. Cada segundo maneja su lenguaje. Hay un creativo dentro de mí, siempre tiene hambre pero solo a veces puedo darle algo que comer. Estoy pensando en mudarme para abaratar costes y encontrar un entorno mucho más favorable para ser persona. En idealista tecleé dos preferencias de búsqueda para lugares habitables. La primera de ellas decía «otra galaxia», la segunda «dentro de mí». Los resultados fueron infinitos. Porque somos infinitos.

El renacimiento; que para mí incluye la respetada búsqueda de Kempis, la indómita pasión de Buonarroti , la atemporalidad de El Bosco, la eterna perfección de Beatrice Portinari y la inspiración brillante que me regaló Ghiberti y que me permitió escapar con dignidad a la existencia contenida de Tiziano; es una época magnífica que se repite continuamente en cada adolescente. No hay mayor maravilla que vivir cada día como si fuera el último ni mayor deseo que sentirse vivo, vivo, realmente vivo, cada mañana y cada noche antes y después de reinventar la vida. Existen constatadas pruebas de todo esto que digo en cada capitulación de nuestros sueños, en nuestra incompetencia épica por proteger aquellos que soñamos. Ninguna de estas pruebas es comparable hoy, esta noche, a la película y adaptación del libro The Perks of Being a Wallflower (Stephen Chbosky, 2012), uno de los mejores cantos en defensa de la adolescencia jamás rodados.

Si aún no eres consciente de qué te pasó o de qué te está pasando, solo hay una respuesta. Cambia en cada momento pero solo hay una. Tal vez te ayude a encontrarla esta película. Personalmente se la dedico a todos los amigos del método que no paran de fabricar nuevas cajas y armaduras para la batalla como si el corazón de cualquiera de nosotros fuera una cadena de montaje de muñecas rusas. Una gran cantidad de momentos componen las cartas que escribe Chris, un alter ego vorpal eternamente callado y tímido incapaz de encontrar su sitio en este mundo, que disfruta de pequeñas sorpresas y descubrimientos durante el viaje. He de decir que una gran cantidad de películas que cruzan el atlántico y abordan la amistad, el conflicto familiar, el amor entendido, me están fascinando por completo. La mayoría de ellas están basadas en libros que han tenido enorme aceptación y difusión allí y eso renueva de una manera loca mi esperanza por la supervivencia de lo que somos.

Cierro esta breve reseña escapando de la pena y del consuelo, sabiendo que muchos de mis amigos están buscando su sitio en estos momentos muy lejos de mí ante una insultante adversidad. Lo que ahora quiero compartir es que sigo creyendo en mí, en lo que hago, en lo que siempre he sido y en lo que podemos llegar a ser. Estos son, seleccionados, los momentos mágicos de este gran film.

«Tengo que deciros algo. He estado fuera de aquí por dos meses. Es otro mundo, se pone mejor.»

«Estaba en uno de mis peores momentos cuando empecé la preparatoria. Pero tú me ayudaste. Incluso cuando no sabías que estaba pasando o sabes de alguien que pasaba por lo mismo, hiciste que no me hiciera sentir solo. Porque se que hay gente que dice que estas cosas no pasan. Y es gente que olvida lo que es tener 16 o cumplir 17. Y todo esto será historia y nuestras imágenes se volverán viejas fotos y todos nos volveremos el padre o la madre de alguien. Pero justo ahora, estos momento no son historias. Esto está ocurriendo. Estoy aquí y la estoy viendo a ella. Y ella es tan hermosa… Lo puedo ver. Es ese momento en el que sabes que no eres una historia triste. Estás vivo. Y te levantas y ves las luces en los edificios y todo lo que hace que te preguntes. Y estás escuchando esa canción, con la gente que más quieres en este mundo. Y en ese momento, lo juro, SOMOS INFINITOS.»

 

defender tu sueño

defender tu sueño

kontikip

«Para conectar realmente con las personas y ayudarlas, tienes que ser un espejo«

Madre Teresa (compartido por JM Luzárraga en Casa Arregi, Oñati)

Los que ahora pronuncian las palabras LeanStartup seguramente no conozcan la historia de una de las más grandes aventuras surgida a partir de una idea, un prototipo rudo, determinación y la fe en la fortaleza de un equipo.

Cuando en 1947 Thor Heyerdhal intentó demostrar que siempre había sido posible cruzar el Pacífico con la sola ayuda de una balsa y una vela, nadie le creyó. Por su mente entonces no pasó la idea de renunciar a defender su propio sueño y a más de 10 años de investigación en Fatu Hiva (Polinesia) junto a su esposa. La mayoría de investigadores aseguraban que algunos nativos procedentes de Asia habían accedido a Polinesia mediante largas rutas de navegación a bordo de grandes navíos o barcos primitivos dotados de cierta complejidad técnica. Esta teoría se veía reforzada por un argumento muy sencillo: ningún ser humano hubiera ido capaz de navegar 5000 millas (8000 kilómetros) desde América en pequeñas barcazas a merced de las corrientes oceánicas. Thor Heyerdhal pensaba lo contrario…

Ha llegado a la gran pantalla la adaptación del documental que en 1950 el propio Heyerdhal rodó sobre una de las mayores aventuras naúticas de la historia. Kontiki (2012, Joachim RønningEspen Sandberg) es una película noruega que nos relata no solo la propia aventura sino los precedentes de la misma. Gran banda sonora y mejor trama tejida a partir de los hechos narrados en el libro y documental de Heyerdhal.

Algunas coincidencias entre las mitologías y arquitecturas inca y la polinesia, los descubrimientos de hombres de raza medio blanca durante la colonización polinesia y algunos testimonios incas recogidos por los españoles, hicieron pensar a Heyerdhal que existían más que sobradas razones para sostener que los primeros habitantes de Polinesia habían emigrado desde Perú hacía más de 2500 años. Tras numerosas visitas sin éxito a los principales periódicos y editoriales de la época en una búsqueda frustrada de financiación para sufragar investigaciones en detalle, decidió emprender una de las más grandes aventuras de la historia reciente de la Humanidad. Gracias a la ayuda del gobierno peruano logró reunir los recursos suficientes para construir una barcaza precaria con los mismos materiales que los incas podrían haber utilizado en su búsqueda de nuevas tierras. En contra de la opinión pública y de la académica, reunió a un equipo formado por suecos y noruegos y en 1947 definió la estrategia de su expedición:

POR QUÉ: Estaba convencido de que su teoría era completamente cierta y necesita demostrar y demostrarse que era posible hacerlo.

QUÉ:  Una ruta hacia la Polinesia desde América que comprendía 100 días de navegación a través del Pacífico cubriendo 4300 millas naúticas de viaje.

CÓMO: Una balsa, un equipo y un reto. La balsa fue construida con 9 troncos, cada uno de ellos de 13,7 metros de largo y 60 centímetros de diámetro, unidos entre sí con la ayuda de cáñamo Transversalmente a los troncos principales se ubicaron troncos de balsa de 5,5 m de longitud y 30 cm de diámetro, a intervalos de 1 m, y con el objetivo de dar soporte lateral. Se utilizaron tablones de pino en los laterales de la embarcación, así como secciones de 60 cm de largo y 2,5 cm de espesor del mismo material para las acometidas. Ningún material de hierro o metal fue empleado en la construcción. El equipo lo formaban Thor Heyerdahl, Knut Haugland, Bengt Danielsson, Erick Hesselberg, Torstein Raaby y Herman Watzinger; perfiles multidisciplinares pero complementarios que construyeron un mismo reto a lo largo de su viaje. El reto era VIVIR y llegar vivos.

Partiendo del puerto de Callao (Perú) y tras 101 días de navegación extrema, la pequeña barca bautizada como Kon-Tiki en honor a Tiki, el dios del sol polinesio, llegó a Raroia (Polinesia) el 7 de Agosto de 1947. Nada de esto sería completamente fascinante e inspirador si no conociéramos el hecho contrastado de que Thor Heyerdhal nunca supo nadar.

La épica historia de Heyerdhal cruzando el charco con apenas unas provisiones es altamente útil para recordarnos el valor de la convicción y la fe en un sueño. Por encima del escéptico y del desengañado. Más allá de eso que todos llaman lo correcto. Heyerdhal prototipó su experiencia de aprendizaje en un formato más que razonable. Trascendió la barrera del aprendizaje individual para dibujar aprendizaje sobre otros. Porque vivir no es solo una experiencia compartida sino el único medio eficiente para aprender y rebelarse. Os animo a leer algo que escribió Heyerdhal en uno de sus primeros libros tras su primer viaje con su esposa Liv a Polinesia:

«Dos jóvenes inmaduros subían al tren para embarcarse en Marsella en un enorme buque transoceánico, con billete hasta Tahití. Un billete hacia el paraíso, pensábamos nosotros. Pero la conclusión del viaje fue precisamente que no se puede comprar la entrada al paraíso. Los que conseguían encontrarlo, lo hallaban en su interior y hasta allí llegaban gratis. Todo lo que he visto y leído me ha enseñado que, en este planeta, el infierno y el paraíso no están en lugares distintos, sino siempre en el mismo. No se puede elegir uno u otro simplemente mudándose. Los dos aparecen como amigos inseparables por muy lejos que se viaje.»

Hunt for paradise, 1938

 

NOTAS:

El libro Kon-Tiki ekspedisjonen (1948, Heyerdhal) en el que relata su experiencia de aprendizaje ha sido traducido a 70 idiomas y ha vendido más de 50 millones de copias en todo el mundo. El documental Kontiki (195o, Heyerdhal) ganó un oscar de la Academia.

Desde hace menos de dos años en Noruega existe una impresionante propuesta para formular nuevos modelos de aprendizaje basados en la experimentación denominada Thor Heyerdhal Videregäende Skole, una escuela de 24.000 m2 donde la curiosidad, la esperanza y los espacios abiertos sacan a los estudiantes de las clases para aprender de forma operativa evitando posibles barreras morales  prejuicios. Los estudiantes aprender Diseño, Electrónica, Negocios o Ingeniería en un ambiente inspirado por la historia de superación de Heyerdhal. Más info aquí.

On the road: StartupBus Europe, lessons learned

On the road: StartupBus Europe, lessons learned

zurich

Greenpeace Zurich protest against the finantial sharks. «All together» attitude 😉

As a completely crazy fan of Jack Kerouac´s way of life, this post must have this title 😉 During the last days I was engaged in a fascinating learning journey to myself. Yeah, I know, as usual 😉 But this time it was different because I shared the learning experience with passionate young entrepreneurs and dreamers. Yeah, I know, as usual 😉 But this time I did it inside a bus without Wi-Fi moving to Paris. Oh yeah!!! 😉 You all know that the situation in Spain is not the best for dreamers, in fact probably some of you think it´s the worst in Europe. But 23 mad people thought otherwise when they embarked on a bus that would travel from Barcelona to Paris visiting Valencia, Madrid, Santander, Bilbao and Donosti to share their experience and real projects with other european dreamers. StartupBus is added now to my disruptive learning experiences.

StartupBus experience started a couple years ago in US and now becomes reality in Europe. The crazy dream of Elias Bizannes became true and it was the first succesful model to all buspreneurs. Since more than 30 cities worldwide routes begin to participate in various international competitions are organized on a continental match. This year, two brothers in Spain have managed all the the needs to introduce a route from our country to participate in European competition to be held on December 2012.

During this experience a group of cameras has filmed the entire process to make a documentary that for many will serve to explain what happened inside. The level inside the spanish bus was high in terms of enthusiasm and skills of all members. My first contact occurred in Madrid when we attended several master classes before departing. Once inside the bus I wanted to introduce myself and share some concerns with the crazy brothers Alvarez and company. During the first few hours I knowed the ideas and projects of all buspreneurs and I decided to help in business and strategy in the final projects. During the trip I was reporting the whole experience because I was interested to know also how the Viking Bus, the Oxford Bus and the French Bus were living their respective journeys. We had a major problem leaving Madrid with the Wi-Fi connection but we convert that problem into an opportunity relating us quickly and dynamically inside without any communication barrier, like building a little P2P culture inside ;)) I think with the internet and other facilities we may not lived the experience as intensely as we lived it. I remembered the first day allways sharing ideas and impressions, prototyping from scratch, visiting and talking with all the bus. On arrival at Donosti, I saw some of my brothers minners and shared a funny night with them before going to sleep (thanks, Ñaki!!!)

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Great moments during the trip with the Eiffel Tower behind and in several cities with Carlos, Jaume, Aymar, Joel, Joan, Samantha, Tere, Chris, my timisister Ane, Liher, great Zaldua, Pedro, Pascual, Bruno, Lucas, Óscar,…

During the trip we met innovation and coworking centers and met interesting people. Upon arrival in Paris, the Spanish detachment competed with other buses in the semifinals for a chair in the final. No luck for two Spanish projects but The Best DJ is went directly to the final after a great pitch. The other two projects were in the playoffs competing with more than 10 projects for final access to Microsoft day before LeWeb Conference.

I liked seeing already in the semifinal that most every team proposals were aimed at solutions for problems related with employment, collaborative management, user empowerment, crowd and geolocation. With a real project preparing the final we only have one inmediate goal: put the other two projects in the final. After a competitive struggle the jury appreciated spanish Beat Goliat as a real and well-crafted proposal to change the world but without an acceptable pitch and comunication. This fact prevailed over the high quality of communication proved by the great team of Qbeeco, one of my favourites pitchs in all the process (including the final) as I recognized to his team. At the last moment the spanish JobSquare team decided to leave the competition so… at the end two projects of StartupBus Spain were in the final competing with the other 7 startups, becoming mad in the taxi to Microsoft (Dani, thank goodness you’re alive and that Paris does not have you as Hangover Part II in Bangkok ;).

After the high voltage revolution we closed the experience with a party in Paris with all buspreneurs gathered (french, vikings, spaniards, germans and english entrepreneurs). Spaniards gave everything in all senses and emptied several bottles of gin before boarding the bus. Undoubtedly one of the highlights was sharing lessons learned on the journey back to Barcelona inside the bus in the early hours of … ok I lost all references, I don´t remember when it was… aftermath of several happy days without sleep ;)) I proposed to share what we all have learned in the pure style of my loved Team Academy community 😉 When we arrived to Barcelona, a excited bus driver told us the story of his son, an engineer who had to emigrate for a better  life to other country. The driver said: I wish you the best luck in the world, you have to take the country forward. You are completely admirable as the only future that we can have so work hard and thank you for the attitude you show me during these days. As old as I am, I have learned much from you. Incredible words to close an incredible journey, don´t you think??

My feedback is very positive after millions of chips consumed, and other fast food like sandwiches, chocolates, biscuits…; after sleeping on the floor, being cold, having a broken back at the mornings… I lived with wonderful people and learned a lot of you trying to give the best of me. I hope I have covered all your expectations, buspreneurs. A big hug and the best luck for you.

NOTE: You can get more information about my work here

Why bet for Beat Goliat?

Why bet for Beat Goliat?

beatgoliat«Life is just about NOs and Oh yeahs!»

Anna Muni, spanish buspreneur 2012

In a later post I will talk about my adventure in StartupBus Europe, but now I want to share my alternative defense of the Beat Goliath project with the StartupBus community. Beat Goliat was one of the final projects in the competition and I want to Thank all my buspreneurs teammates for everything they learned and what they taught me building this project. If I had to defend or explain Beat Goliat, I will say something like this…:

Sorry jury, sorry Elias, but life on earth is not Silicon Valley. Although Silicon Valley may be a shared reference for many, the reality of the world is extremely more complex than a great ecosystem of entrepreneurship and agile culture. It´s allways more complex than a city, more complex than a citizen or a user. And that’s the reason because San Francisco has one of the highest levels of homeless people in a western city while be the innovation center of our world . Every day I get up in the morning and every night at bedtime, I realize these complexities. Today I´m going to tell you a proposal to improve, help and encourage people to fight against these complexities wherever they live.

When I think what is the most important argument to live, I allways think on my grandfather. Not all the grandfathers of spanish people were bullfighters and not all the grandmothers were flamenco dancers, but of course this was my case at least in half. Why my grandfather went day by day to the bullring to fight against one of the most powrful animals in the earth? This question has been with me all my life and probably today, after this learning experience, I have an answer. He went there, to the sand, because my family was hungry in spanish civil war but Why he went there day by day in one of the most richful periods of spanish history before that? He was playing with his live, you know? Maybe he could choose another employement but he didn´t. I think the answer is a mix of passion and social recognition.

When we leave our confort zone, we can grow up as fast as we want. Because there is no barriers in the land of the personal development. But what about sharing a social development? Many of the heros we have here today have the world PASSION in their foreheads. We are all talking today the same language presentation after presentation. The jury is tired of hearing the same words: geolocation, mobility and crowd. And that´s happen because a reason. It´s not about Barack Obama, Angela Merckel or Mariano Rajoy. Of course is not about the last one 😉 But future and life on earth is about YOU. Concepts like family, respect, commitment, peace or angry birds depend on you. Neither fucking Google nor Microsoft are going to change the world. Don´t expect that in your chairs right now, buddies. They know it because they are playing anothe league, another division. When I studied free software communities I learned one thing: as my grandfather, we need social recognition and support. But first we need to talk in the same level to the brands and corporations. We couldn´t do this till the moment before you entered in this auditorium. But now…

I want to introduce you Beat Goliat, the speaker of the crowds to build a better and a real user-centered brands and services by a new concept: social complain. You are not crazy enough if you think that you can change the world only with a single complain. Do it social, do it with others, beat your own Goliat with others Davids. We are going to empower the user while brands are going to improve their services. We hack the system to make it more human and real. Whith this idea users have a voice and the brands have a real-time connection with user needs through hard feedback. We commerce with this big data and we build strong campaigns to talk with corporations in their level. Because we can use the market to humanize the market. And this is Beat Goliat, a shared dream for all. Thank you so much for your attention and keep on rocking!

That´s all! Dream and share, friends!!. I want to thank Joan, Samantha and Elias for their commitment and contribution to the amazing adventure of StartupBus Europe. I´m a profesional experience designer and I have to recognize that your work was awesome, guys!!

jantelagen, el equilibrio de Nash y el mercado

jantelagen, el equilibrio de Nash y el mercado

Aksel Sandemose (1899-1965)

JANTELAGEN

Existe en la cultura escandinava (danesa, noruega pero sobre todo sueca) un conjunto de normas que forman parte de una identidad  común y que fueron enunciadas por el escritor Aksel Sandemose en 1933 en su novela En flygtning krydser sit spor (Un refugiado sobre sus límites). Al conjunto de las 10 normas que enunció Sandemose se le conoce como Janteloven (en danés) o Jantelagen (en sueco). Se trata de una ley ficticia que rige los usos y costumbres nórdicos y que configura en gran medida el modelo de vida sueco.

La ley de Jante representa para el modo de vida nórdico un itinerario de viaje para la construcción del interés común. Forma parte de un acuerdo tácito de mínimos que nace de la sociedad escandinava rural de principios del siglo XX. En este entorno de vida, contrario a la cultura depredadora de mercado pero exitoso, no sobresalir ni destacar genera seguridad y aceptación. Las diez normas de la Ley de Jante que compartimos han propiciado en las últimas décadas un lugar común en el que lo homogéneo significa bienestar y el reconocimiento de la comunidad se basa en la humildad sincera. Estas son las 10 normas que Sandemose recogió en la denominada Ley de Jante:

1. Du skall inte tro att Du är något. 1. No pienses que eres alguien
2. Du skall inte tro att Du är lika god som vi. 2. No pienses que eres tan bueno como nosotros.
3. Du skall inte tro att Du är klokare än vi. 3. No pienses que eres más inteligente que nosotros.
4. Du skall inte inbilla Dig att Du är bättre än vi. 4. No te engañes pensando que eres mejor que nosotros.
5. Du skall inte tro att Du vet mera än vi. 5. No pienses que sabes más que nosotros.
6. Du skall inte tro att Du är förmer än vi. 6. No pienses que eres superior a nosotros.
7. Du skall inte tro att Du duger till något. 7. No pienses que eres bueno para algo por ti mismo.
8. Du skall inte skratta åt oss. 8. No te rías de nosotros
9. Du skall inte tro att någon bryr sig om Dig. 9. No pienses que preocupas a alguien
10. Du skall inte tro att Du kan lära oss något. 10. No pienses que puedes enseñarnos algo.
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John Nash. 1968, matemático estadounidense

EL EQUILIBRIO DE NASH

Como observáis la Ley de Jante parte de la práctica anulación del individuo en favor de la igualdad social. Esta conducta es apriorítica y está  relacionada con los comportamientos no cooperativos de suma cero. Como sabéis, la teoría de juegos es un área de la matemática aplicada que formula modelos para explicar las interacciones en esas estructuras formalizadas de incentivos que denominamos juegos. Este área de la matemática está orientada a la toma de decisiones.

En los planteamientos sociales de suma cero estudiados por la teoría de juegos, las ganancias y pérdidas de un individuo son compensadas por las ganancias y pérdidas del resto de individuos de su comunidad (o equipo). Básicamente se trata de una compensación en la que siempre existen pérdidas y ganancias para que exista un beneficio común. En la actualidad muchos autores consideran que el progreso de la humanidad estará basado en sistemas de sumas no nulas en los que existan escenarios WIN-WIN (ganancia-ganancia). A mi modo de entender, la práctica totalidad de la macroeconomía actual está basada en sistemas de suma no nula pero la práctica totalidad de la microeconomía está basada en sistemas de suma nula.

El propio Dilema del prisionero demuestra que dos personas pueden no cooperar incluso si existe un interés común, algo que sin duda a menudo no parece lo más inteligente pero sí lo más frecuente. El concepto sobre el que se apoya este dilema, el equilibrio de Nash, debería hacernos pensar en que a menudo la suma de intereses individuales beneficiosos no conduce necesariamente por sí sola a un interés común satisfactorio. Los defensores de la suma no nula, es decir, los defensores de la cooperación como motor de desarrollo, sostienen que la mayor parte de bienes menores siempre sumarán un bien común mayor y que la inteligencia colectiva y el pensamiento relacional son altamente beneficiosos en la mayor parte de casos. En la película Una mente maravillosa (2001), los creativos guionistas de Hollywood presentaron el momento de lucidez de John Forbes Nash a su propia manera. Se trata de una secuencia de la película que os recomiendo ver 😉

Nash dedujo que lo mejor para una persona no es actuar únicamente de acuerdo a lo mejor para él sino además actuar también de acuerdo a lo mejor para los demás. Lo que vino a dejar claro Nash echó por tierra gran parte de la teoría económica de Adam Smith sobre la que se fundamente el liberalismo de mercado. Nada que nuestro admirado Ortega no hubiera dicho décadas atrás con su «Yo soy yo y mis circunstancias«. Y sin embargo, pasados los años, en la actualidad cualquiera de ambos planteamientos continúa siendo revolucionario.

Nota: Recomiendo esta entrada sobre la relación entre Equilibrio de Nash y Pensamiento sistémico

 

LA CONSTRUCCIÓN DE EQUIPOS

Sobre lo que hemos dicho hasta ahora y desde el punto relacional, parece que existen dos modelos de construcción de equipos: aquellos basados en trabajar las diferencias entre sus miembros y aquellos basados en trabajar las semejanzas. Desde la iniciativa creemos que no existe tal contradicción y que hay que trabajar ambas de forma conjunta. Es evidente que seguimos siendo tremendamente individualistas como comentaba en una reciente entrevista y que es necesario trabajar en esas transiciones mixtas. La que más respeto es la transición hacia un comportamiento cooperativo. Para que surja un comportamiento cooperativo en el que todo el mundo es parte del viaje, son necesarias algunas condiciones básicas:

  • Una coincidencia de deseos. En este punto es importante indagar hasta llegar a una base común primaria aprobada por todos los integrantes de la comunidad o equipo sobre la que trabajar para formular una estrategia.
  • Una probabilidad de futuros encuentros con el resto de individuos. Aquí es fundamental la gestión de expectativas a futuro de cada miembro respecto al resto de miembros del equipo. Confianza, identificación y aceptación entran en juego para valorar qué expectativas puedo tener respecto al comportamiento del resto de miembros del equipo.
  • Recuerdos positivos de anteriores experiencias con el resto de individuos. Muy relacionado también con la gestión de expectativas pero en estrecho vínculo con el pasado. Qué hemos experimentado de forma positiva que nos puede determinar a actuar en común con el resto de personas.
  • Un valor asociado con futuros resultados. Aquí entra en juego lo que yo personalmente considero como bien común a título individual. Es necesario trabajar esto en relación a lo que el resto de personas entienden como bien común. Este paso es fundamental para la generación de identidad de equipo, por ejemplo.

 

Christian Felber. 1972, profesor de economía austríaco

EL MERCADO Y EL BIEN COMÚN

En la mayor parte de foros en los que la gente habla de bien común se olvida que ese término permanece aún sujeto a debate y que es necesario construir el consenso sobre lo que es bueno para todos desde cada área de aplicación o estudio. La mayor parte de profesionales que hablan de la cultura de bien común parten, sin saberlo, de matrices de recompensa de suma cero. En estos escenarios todo el mundo pierde y todo el mundo gana pero finalmente existe un equilibrio común para los participantes que configura el resultante «bien común». Olvidan que otras aproximaciones son también igualmente válidas y que cualquier propuesta holística de bien común nunca será compartida por la mayoría. Conozco no pocos casos últimamente de empresas que no paran de generar productos «perfectos» o paquetes de soluciones integrales que son inasumibles por el mercado. Ya no se trata de construir grandes suites sino pequeñas funcionalidades adaptables. Las grandes ideas han pasado a ser las más pequeñas. Y no es algo aleatorio, todo sucede por algo.

Ejemplos muy inmediatos nos han demostrado que sistemas cooperativos puristas no son viables porque no trabajan lo que desde la iniciativa denominamos transiciones. Esto es, momentos de cambio muy frecuentes en los que se hace necesario partir de lo que se tiene para poder conseguir lo que se quiere. En estos escenarios trabajar con la realidad es fundamental. Ahondando en lo que hemos denominado dinámicas de aporto/necesito desde la iniciativa, podemos llamar mercado a esta realidad social en la que unas personas u organismos aportan y otros necesitan en función del momento y el contexto.  De acuerdo a esta realidad social de nuestros días solo pueden sobrevivir los sistemas cooperativos que se desarrollan enmarcados en un contexto competitivo. Del mismo modo o precisamente por ello, en la naturaleza la mayor parte de casos relacionados con cooperación tiene que ver con la asociación de diferentes especialistas o especialidades que colaboran por un beneficio mutuo.

Por tanto, y solo como aviso para navegantes, más allá de von Wieser, pasar de la economía del individuo (en la que vivimos) a la economía de la comunidad requiere bastante más que pensar en bienes de consumo colectivo. Me resultan muy interesantes algunas aproximaciones a este problema como las llamadas Economía del bienestar o la muy reciente Economía política del Bien Común que se ha visto completada por la propuesta de Christian Felber (2012) que aboga por un modelo que supere el capitalismo y la economía de planificación, ambos en franca decadencia y altamente incontrolables en la actualidad.

 

EL LAGOM Y EL MAL DEL PENSAMIENTO DE GRUPO

En 2007 @tiadoc en una carta a Ivanna compartía la existencia de una palabra sueca denominada «lagom» que quiere decir algo así como «ni mucho ni poco» pero que también denota un determinado tipo de actitud basada en un carácter exigente pero a la vez acomodaticio. Una perversión social de equilibrio de Nash que está condicionada por el mismo acuerdo de mínimos o anulación que se plantea en la Ley de Jante. No son casos particulares o extraños. Lo más frecuente en el pensamiento social, comunitario o de equipos es que las decisiones, normas o directrices estén basadas solo en una cara de la moneda: o bien favorecen tan solo al interés de la individualidad o bien favorecen tan solo al interés común del grupo. Es decir, normalmente se toman decisiones igualmente equivocadas por buscar el consenso a toda costa (algo que a menudo no es viable) o por buscar el disenso a toda costa (algo que es igualmente inviable) Me resulta complicado encontrar una empresa u organización en la que la construcción de equipos se haya realizado.

En 2009, en el blog Ponte en mi lugar, la autora compartía algunos síntomas del mal del pensamiento de grupo (ese lugar común donde la anulación común del equipo es continua) trabajados en relación a la Ley de Jante:

Ilusión de invulnerabilidad: Los miembros ignoran peligros obvios, asumen riesgos extremos, y son demasiado optimistas.
Racionalización colectiva: Lo miembros desacreditan y encuentran excusas para amonestar pensamientos contrarios al del grupo.
Ilusión de Moralidad: Los miembros creen que sus decisiones son moralmente correctas ignorando las consecuencias éticas de las mismas.
Exceso de estereotipos: El grupo construye estereotipos negativos de los rivales fuera del grupo.
Presión para alcanzar conformidad: Los miembros presionan a cualquier miembro que exprese argumentos en contra de los estereotipos, ilusiones o compromisos del grupo considerando tal oposición como deslealtad.
Autocensura: Los miembros ocultan sus puntos de vista diferentes y sus contra-argumentos.
Ilusión de Unanimidad: Los miembros perciben de forma falsa que todos están de acuerdo con la decisión del grupo; el silencio se considera consentimiento
Guardianes: Algunos miembros se autodesignan con el rol de protectores del grupo en contra de informaciones negativas que puedan amenazar su autocomplacencia.

UNA CUESTIÓN DE CULTURA…

Lo que hoy quiero compartir es que el problema de la construcción de equipos, no es algo exclusivo de la cultura tradicional. Hablo, disfruto y sufro a diario con profesionales de innovación de primer nivel y todos ellos me manifiestan sus serios problemas para formar equipos con otros profesionales. A menudo se trata de problemas de confianza y compromiso pero en la raíz de ambos casos se encuentra una incapacidad latente para construir un interés común. Realizo enormes esfuerzos también a diario por aglutinar diferentes talentos y perspectivas y proyectarlos sobre diferentes transiciones. Recibo llamadas en las que algunos emprendedores con marca propia o aparentemente consolidada me comentan que están hartos de intentar hacer equipos y que prefieren realizar «la guerra por su cuenta» para conservar el purismo o el discurso sin perder un ápice de esfuerzo en ninguna realidad común.Todo esto me hace pensar que la incapacidad para construir un interés común se basa en un problema cultural.

Como tal, es un problema compartido que incluso mi equipo y yo mismo sufrimos a diario. Creo que ya no estamos en la época en la que vender que éramos perfectos (mentir) era la condición necesaria para trabajar con alguien. Todos tenemos problemas y todos manejamos aproximaciones diferentes para resolverlos. Desde esta humildad sincera (muy en la línea de la Ley de Jante) nosotros planteamos nuestros servicios como un acompañamiento para la construcción del viaje hacia el ADN del equipo.

Para concluir, desde la iniciativa estamos encontrando durante este año equipos que necesitan llevar a cabo un nivel de autocrítica muy elevado que en muchos casos no están dispuestos a asumir. Esta autocrítica a menudo degenera en autocensura individual porque los canales de comunicación entre las personas están frecuentemente pervertidos o no existen. Lo que siempre, en todos los casos, hemos recomendado es partir de la honestidad, de lo que una persona necesita y de lo que siente. Antes y después de cada paso del camino. Focalizar y no avergonzarse de lo que una persona es, ayuda a construir futuro. Sobre todo en un terreno inexplorado como este en el que todos, cuanto menos, deberíamos de sentirnos muy humildes.Quiero cerrar este artículo con una cita de la autora del blog Ponte en mi lugar al que ya hemos citado. Creo que es un ejemplo claro de honestidad y de optimismo inteligente:

«LA IMPORTANCIA DE LLORAR

Yo lloro mucho. Por cualquier gilipollez y hasta por cosas importantes. Lloro porque estoy viva, porque me voy a morir, por los recuerdos buenos, por los malos, porque me siento identificada, porque no te reconozco o porque sí…porque ya toca.

No te asustes si me ves llorar. No sufras, porque yo no lo hago. Si eso me abrazas, que mal no me va a hacer. Y verás que la sonrisa de después es mucho más clara y los ojos más verdes.

Yo no lloro. Hago limpieza general del alma. Pirólisis de sentimientos. Pongo el marcador a cero. Más a gusto que un arbusto. Que no te dé miedo. Que no muerdo.»

Y punto.