Disculpad que siga en tono Scruch porque no es una simple queja. Me está afectando. Sigo preocupado con el despilfarro de talento en España, en concreto por lo que algunos denominan ya la Diáspora del talento en España y que es un problema muy grave que tiene su orígen conceptual en el fenómeno del brain drain (la entrada de wikipedia que os enlazo hace un repaso histórico muy interesante) o del llamado human capital flight, literalmente: el vuelo del capital humano. Luisa Montuschi ha realizado un estudio más que interesante sobre la capacidad que tienen las comunidades de perder talento y sobre las migraciones del capital humano en la Sociedad de la Información y más en concreto en la clase PTK (Profesional, Technical and Kindred). Gilles Saint-Paul, de la Toulouse School of Economics hace ya tres años escribió un artículo titulado The european brain drain: european workers living in US cuyas premisas y comportamientos socio-económicos parecen trasladarse cada vez al ámbito local, en este caso a nuestro país. También es un problema que ya ocurrió en Argentina hace algunos años y del que habla Micaela Persson en El drenaje de cerebros: una aproximación holística a la realidad argentina. El abstract de este artículo puede servirnos de advertencia y WARNING local para nuestro caso:
En la actualidad existen unos 7000 científicos argentinos trabajando en el exterior, que a diferencia de las emigraciones precedentes, el origen de las causas se fundamenta en cuestiones básicamente económicas. En tal sentido, este país periférico subsidia la actividad científica de los países del centro, acrecentando la brecha del desarrollo, anulando así, cualquier perspectiva de avance en el desarrollo nacional, paradójicamente, en un contexto en donde el mundo compite por el dominio del saber.
La historia es cíclica y esta vez también se repite. Ya no migramos por guerras, sino en busca de conocimiento. Parafraseando a Micaela, “subsidiamos” la actividad del conocimiento a países creadores y convertimos a nuestro país en un mero consumidor de conocimiento. Estamos desaprovechando diariamente la oportunidad de ser parte del eje vertebrador del conocimiento. Y lo malo es que tenemos conocimiento pero no sabemos como gestionarlo y lo maltratamos. En la sociedad del conocimiento, es así como estamos evitando en España nuestro desarrollo como comunidad, no de otra forma. Obviamos este problema a la espera de un mesías. Problema: el mesías eres tú.
Creo que esta noche hay un debate de dos personas que se van a presentar a presidentes del gobierno. El problema es que no me preocupa lo que van a decir. Nada. En los últimos 30 días, 4 amigos míos con estudios superiores, cada uno con conocimiento en diferentes ramas de consultoría e I+D y alrededor de 10 años deambulando por empresas e instituciones españolas, se han ido fuera cansados de la falta de reconocimiento y de la cultura de trabajo nativa. No saben si encontrarán lo que quieren fuera de este país pero sí están convencidos de que aquí dentro no pueden abrirse paso de ninguna manera. Estamos hablando de un problema grave de reconocimiento y canalización de talento. Las razones que me expusieron el otro día entre cañas no tuvieron nada que ver con la crisis, con los bancos, con finanzas, con los 55.000 millones que han descubierto en Alemania o los tropecientos mil que faltan en Grecia. Sobre todo porque parece que en los últimos meses criticamos en global pero no paramos de equivocarnos en local.
Ellos se van porque no encuentran cabida aceptable en un modelo de mercado orientado a servicios y al corto plazo. El detalle argumental que me dieron es este:
- Falta de financiación en investigación y de un plan riguroso y transversal de I+D+i que genere ecosistema y cultura, conexión entre la investigación y la calidad de vida (la inversión). No hay networking de conocimiento ni conciencia de ello. Priman los eventos y congresos e iniciativas personales de gente admirable pero nuestro modelo de trabajo país no es transaccional porque ni siquiera es relacional. Estoy orgulloso de nuestra propuesta i-deals en este sentido y nunca le sabré expresar a @angelsanchez la falta que hace su planteamiento en este sentido.
- Falta de capacidad de desarrollo de negocio a gran escala. Existe un gran tejido PYME en todos los sectores pero los casos de grandes éxitos o fracasos (incluso) a nivel internacional son aún muy tímidos. La proyección es compleja aunque hay ejemplos de que es posible un cambio. El problema es que el cambio es a base de mucho desgaste y el coste es elevado.
- Nula cultura de aprendizaje y mejora continua. Se castiga y se hunden negocios al primer error o revés del mercado. Achaco esta falta a la carencia de un modelo educativo sólido y continuado con cambios constantes de planes y sistema a través de los diferentes gobiernos. También a una desconcienciación masiva del hecho de que la educación nos afecta y es responsabilidad de todos. En el blog hay modelos educativos con los que sabéis que simpatizo y que evitan esta carencia.
- Ausencia casi total de networking y cultura de innovación abierta. A excepción de iniciativas de pequeña escala y pioneros. En el mundo 3.0 del que habla Ghemawat caminamos con pies de dinosaurio, luchando por separado y sin aprender en común. CERO inteligencia colectiva a pesar de iniciativas sectoriales y comunitarias encomiables pero que actualmente son quijotescas. No hay cultura de colaboración. Seguimos compitiendo con el “menos recursos por más dinero” en lugar de asumir el “más recursos con más conexión”
- Maltrato continuo de la creatividad en entornos de fábrica constante en los que se prima la masa sobre el detalle. Pérdida de valores artesanos, cercanía y humanidad.
- Incomprensión de lenguaje. La sociedad no habla el idioma de los técnicos y solo paga por aquello que comprende. Triunfan los negocios generalistas con un público objeto maximalista. Ni el mercado español habla su idioma ni ellos hablan el idioma del mercado español. Aunque hablan en castellano, resulta que sienten que piensan en inglés. Porque sus ideas vienen de fuera. Consecuencia: deciden irse a aprender el idioma en el que piensan para de paso aplicarlo al planeta en el que viven. Esta desambigüación políglota genera un trastorno grave del talento. Hace unos días @berniehernie decía de algún modo que hace falta superar esta incomprensión entre actores mediante la formación y la tecnificación. Menos MBAs y más gente con inquietudes que sepa concretar.
- Ausencia de motivación tras probar suerte en el mercado español. Bolsa de trabajo débil, sistema de retribución cuestionable, y de nuevo mala inversión. Invertir no consiste en gastar, consiste en plear un dinero para sacar un beneficio mutuo. Es la forma más antigua de colaboración después del mercadeo. Hecho: No sabemos invertir en conocimiento.
- Asesinato de ideas por medio de la burocracia y los aparatos 1.0. Crimen perpretrado en estrecha colaboración por Estado y clase empresarial. Tímida aparición de thinktank de conocimiento, no orientados a política ni al poder sino a generar valor social real. Estos núcleos de conocimiento están controlados por las grandes corporaciones que a su vez manejan cultura 1.0. El papel dinamizador de I+D+i en Telefónica en España es esencial pero está excesivamente concentrado el control de estos focos de conocimiento.
Los 4 intentaron intrainnovar en las diferentes organizaciones a lo largo de su carrera y los 4 hayaron la misma respuesta día tras día. Yo también estoy algo desencantado con la falta de permeabilidad de las organizaciones con las que he colaborado. Y eso en un mundo en el que la innovación dejará de venir de San Francisco y de los laboratorios para instalarse en cada casa. Tal vez por eso no me interese el debate de esta noche. Porque esta noche nadie hablará en serio de innovación, de emprendimiento ni de educación. Ninguna de las tres da dinero ni votos a corto plazo y sin embargo son pilares del nuevo estado de bienestar. Sobre todo la educación. Lo que históricamente sí da dinero y genera afinidad es la gestión del miedo. Las propuestas de cambio son propuestas de continuidad, de gente que ha formulado en otro tiempo el modelo que ya ha dejado de funcionar. Esta noche cuando escuchéis atentos al televisor los mensajes catastrofistas del otro y los mesiánicos propios, cuando oigáis el “y tú más” comenzad a entonar internamente el “y yo cada vez menos“. Y sobre todo, haced algo por evitarlo 😉
Y sin embargo hemos avanzado: Antes nos exiliábamos por hambre en busca de dinero, perseguidos por nuestras ideas políticas; ahora nos exiliamos por conocimiento en busca de dinero, maltratados por nuestras ideas. 🙁
Otros artículos:
Educar talentos para exportar artículo del diario Expansión y empleo.
Estudio sobre drenaje de cerebros realizado en Venezuela con reflexiones interesantes del fenómeno de drain brain.
Drenaje de cerebros. Marco histórico y conceptual por Enrique Oteiza, Buenos Aires
Crear y perder cerebros pone en riesgo el futuro, Tulio del Bono, La Nación, Buenos Aires.
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