Tras ver el genial documental Copiad, malditos (2011) dirigido por Stéphane M. Grueso, licenciado bajo creative commons y emitido en RTVE, no nos queda más que recomendaros parar el mundo durante los 58:26 minutos que dura el documental para atender y tomar nota de los otros puntos de vista no afines al dogma cultural establecido basado en aranceles y licencias de uso que solo benefician a unos pocos. Visitad también el blog de Copiad, malditos. Nos gusta que David Bravo y Javier de la Cueva, a los que admiramos desde Vorpalina, se hayan unido a este esfuerzo por esclarecer las razones esenciales de la arraigada cultura industrial de creación sobre la que nosotros paralelamente ya hablamos hace unos meses en el blog y que tuvo una difusión viral inesperada en la red que os agradecemos sinceramente a todos. La misma productora Elegant Mob Films rodó hace ahora seis años un documental edificante sobre la auténtica y revolucionaria ética hacker. Un concepto esclarecedor sobre las auténticas bondades de la filosofía del software libre que desde Vorpalina llevamos tiempo estudiando y defendiendo. En aquella época no hablaban de los típicos mantras relacionados con ingenieros de software ególotras o adolescentes que delinquen (esos estereotipos que a golpe de imagen nos quieren enseñar), sino que establecían lo que desde el filósofo islandés Pekka Himanen ha sido un compendio útil de principios para acotar y conceptualizar una actitud ante la vida: la ética hacker (2001), lectura vorpal imprescindible que recomendamos recuperar cada cierto tiempo y que supone una de las piedras angulares para modificar conductas de cada a la nueva #culturared. Lejos de ser un código sectario propiedad de pequeños o selectos grupos, la ética hacker es aplicable en cada gremio y actividad humana. Así, en el documental En busca de hackers (2005) podemos ver cómo se puede hacer hackitectura, cómo se pueden generar infraestructuras o alfabetizar tecnológicamente sin licencias, cómo los hackers son creativos y creadores y cómo estos científicos de la curiosidad son capaces de generar foros multidisciplinares de conocimiento abierto que aportan y hacen fluir la colaboración. Como ejemplo de esto último el documental nos habla de la iniciativa FADAIAT que os recomiendo conocer y que ha dado lugar a un documento muy interesante disponible públicamente. En definitiva se trata del conocido formato medialab aplicado a la colaboración entre culturas (Tarifa/Tánger) y/o profesionales de sectores diferentes. Mover el mundo, simplemente. Desde Vorpalina, nuestro apoyo y pulso libre para todos estos proyectos cuyo mensaje, fondo, esfuerzo y sueño compartimos. Nos quedamos con una frase que cuesta entender en las organizaciones actuales pero que es básica para lo que hemos denominado #culturared. La frase la dice uno de los hackers que intervienen en el documental En busca de hackers mientras se muestra la caravana desde la que trabaja uno de los empleados de la empresa y dice así:
“…Trabajar en los proyectos en los cuales quieres trabajar o con la gente con quien quieres trabajar. No tienes que estar en el mismo sitio, no tienes que tener una oficina o ir cada día a las 9 con traje. Yo y mi socio que fundamos la empresa en principio vivimos de maneras muy diferentes. Él vive en un antiguo autobús convertido en casa en el campo en Portugal, yo vivo en un piso en Barcelona. Él quiere vivir donde vive en este momento, yo quiero vivir en Barcelona. Nos gusta trabajar juntos también, es la cosa. Tenemos una comunicación bidireccional por satélite montada en la furgoneta con este equipo, streaming, sonido, etc… que conecta con una fuente de alimentación y así tiramos.”
Esa es la idea: Para trabajar solo es necesario estar lo más conectado posible donde sea, con quién nos interese, para lo que nos interese. Compartir conocimiento y esfuerzo, establecer estrategias desde puntos de vista o lugares equidistantes. Colaborar. Respecto a la primera frase “trabajar en los proyectos en los cuales quieres trabajar o con la gente con quien quieres trabajar”, comparto con vosotros este documento de ese gran oráculo del cambio que es para nosotros el MLab. El documento se titula Getting the right people on the right projects y lo he discutido con algunos compañeros en el trabajo durante los últimos días. Se trata de alinear los intereses de la compañía y los intereses de los empleados que -claro está- deberían ser reflejo de los intereses reales de la compañía.
En el mismo documento se habla de inspirar productividad a través de la pasión. Es algo sobre lo que insisto a menudo: no me importaría trabajar continuamente en algo si el enfoque y objetivos de ese algo me convencen o participo y no heredo de otros las decisiones que conformaron ese algo. Para ello es necesario modernizar las herramientas de colaboración y comunicación en tiempo real favoreciendo la tecnología móvil y el teletrabajo. En IDEO han creado una suite de herramientas de colaboración robusta denominada TheTube que permite a los 500 empleados estar al día de cualquier novedad en tiempo real a través de 10.000 wikis, 1000 webs de proyectos, sistemas de email y bases de datos legales que ellos mismos generan y alimentan. Como siempre insistimos desde Vorpalina, se trata de hacer partícipes a los empleados de la filosofía y misión de la compañía para que se produzca un feedback efectivo. El 95% de los empleados de IDEO actualizan y reportan su página personal y han sido capaces de crear 40 blogs especializados con contenidos de interés para la comunidad (que es la propia empresa en este caso). Una filosofía de red con nodos conectados por la que cada día intentamos luchar algunos. Las claves: una cultura 2.0 de la colaboración y la fe ciega en que compartiendo conocimiento ganamos mucho más que adueñándonos de él.