«Nadie hay entre los que se dedican a la ciencia que no esté convencido asimismo de que ama la verdad»
John Locke (filósofo y médico inglés, siglo XVII,
Ensayos sobre el entendimiento humano, IV, 19,1)
A menudo me declaro divulgador, practicante activo y -en los días en los que me vengo arriba- experto en viejas tecnologías. Por este motivo, el artículo que ahora lees -lector o lectora- resuelve una deuda que yo tenía contigo. Ser experto en viejas tecnologías es compatible con cualquier profesión. En la medida en que la que tú lo seas y te rodees de gente que lo es, las cosas sin duda te irán mucho mejor.
Hoy pretendo compartir contigo la enorme importancia y el valor diferencial de formar, entrenar, cuidar y mantener en tu organización a expertos en viejas tecnologías. Lo haré de acuerdo a tres sencillos apartados:
- Qué es la tecnología: una definición de la palabra y sus implicaciones
- Nuevas y viejas tecnologías: una comparativa rápida
- Las 4 viejas tecnologías más rentables: una selección cuidada y rigurosa a partir de mi experiencia acompañando organizaciones, equipos y personas
Comenzamos.
QUÉ ES LA TECNOLOGÍA
“Si queremos salvarnos de morir ahogados por los medios que nosotros mismos hemos creado, primero debemos observarlos y luego entenderlos”.
Herbert Marshall McLuhan (filósofo, erudito y profesor, 1969)
La palabra tecnología proviene, como tantas otras cosas, de la voz griega τεχνολογία technología, cuya etimología está formada por τέχνη (téchnē) que significa arte, técnica o destreza; y por λογία (logía) que significa estudio o tratado.
En su pionero y ya muy conocido ensayo La aldea global, el profesor Herbert Marshall McLuhan se atrevió a plantear las consecuencias que un mundo completamente conectado podría tener para los seres humanos. Hace más de cuarenta años el sugirió cuatro preguntas que deberíamos responder para cada tecnología:
- ¿Qué genera, crea o posibilita?
- ¿Qué preserva o aumenta?
- ¿Qué recupera o revaloriza?
- ¿Qué reemplaza o deja obsoleto?
No quiero hablar mucho más de McLuhan, no sea que me pase lo que lo pasó a aquel redicho catedrático en la cola de cine en la película Annie Hall tras hablar con tanta seguridad sobre la obra del profesor 😉 Solamente añadiré que considero que estas cuatro preguntas son muy útiles y las utilizaré como guía para explicar el enorme potencial que tienen las viejas tecnologías que hoy compartiré contigo.
Por otro lado, como bien explicaba en su artículo Educación tecnológica para comprender el fenómeno tecnológico el doctor en Física Carlos Eduardo Soliverez «las tecnologías son tan antiguas como los seres humanos. (…) Como señala el entomólogo y biólogo Edward Osborne Wilson en su libro Sociobiología, la nueva síntesis (Ediciones Omega; Barcelona; 1980; pp. 178-182), el mero uso de herramientas es un fenómeno que los seres humanos compartimos con muchos animales: avispas que usan piedritas para cerrar la entrada de sus nidos, pájaros que manipulan ramitas con sus picos para extraer insectos, chimpancés que rompen cáscaras de frutos con una piedra, son sólo algunos ejemplos. La gran diferencia es que las herramientas de esos animales son objetos naturales, mientras que las personas las fabricamos a medida de nuestras necesidades; este rasgo, el propósito, parece ser específicamente humano.»
Una de las entrevistas más esclarecedoras sobre el increíble agravio comparativo que supondría para el ser humano compararse con el resto de especies, la realizó Eduardo Punset al mismo E.O. Wilson y su visionado es más que recomendable.
Tras este breve repaso por el estudio de la tecnología, una buena definición que tome como punto de partida tanto la etimología de la palabra como las consideraciones de estos estudiosos, podría ser la siguiente:
Toda tecnología es el conjunto de artes, saberes, habilidades y destrezas que permiten el aprovechamiento práctico del conocimiento, con el fin de satisfacer las necesidades y deseos de las personas.
NUEVAS Y VIEJAS TECNOLOGÍAS
«Las ideas se tienen, en las creencias se está»
José Ortega y Gasset (filósofo español, siglo XX, Ideas y creencias, I, 1)
Hablamos desde hace años de las nuevas tecnologías. Sin embargo nadie parece reparar en la increíble trayectoria de aprendizaje en viejas tecnologías que la Humanidad ha tenido durante miles de años. Algunas de las viejas tecnologías que hoy compartiré contigo llevan siendo útiles al ser humano desde tiempos inmemoriales. En realidad son la única base útil para que las nuevas puedan resultarnos provechosas.
Para poner en contexto el salto cualitativo en la trayectoria histórica de aprendizaje entre las nuevas y las viejas tecnologías, quiero repasar contigo -lector o lectora- tres datos:
- El Homo Sapiens (tú) con capacidades mentales para aprender, inventar, transmitir y manejar tecnologías complejas en torno a «comportamientos modernos» aparece en Etiopía hace unos 200.000 años, aunque el Homo Erectus ya utilizaba herramientas a diario. Desde entonces no hemos parado de usar y perfeccionar muchas de las viejas tecnologías que hoy compartiré contigo.
- El primer ordenador patentado lo construyó en 1938 un alemán que trabajaba en el apartamento de sus padres. Era una calculadora mecánica denominada Z1. Este es el punto de partida del uso y perfeccionamiento de las nuevas tecnologías.
- El sistema de computación de los años 60 que mandó a los primeros hombres a la luna, la Apollo Guiding Computer (AGC) diseñada por el MIT, tenía 100.000 veces menos capacidad de RAM (memoria de trabajo destinada al procesamiento) que tu teléfono móvil actual.
Entre el primer hecho histórico y el segundo distan aproximadamente 190.923 años de práctica y entrenamiento. Entre el segundo hecho histórico y tu teléfono móvil distan 77 años de práctica y entrenamiento. Puede que tengas abuelos vivos probablemente mayores de 77 años.
Creo en las nuevas tecnologías como parte del progreso de la Humanidad. Creo que son útiles y creo que con un uso humano pueden resultar inteligentes. Para favorecer ese uso humano, nada mejor que ser fieles a las viejas tecnologías como principio y fin y a las nuevas como medio. De una organización, un proyecto, una relación o cualquier cosa.
LAS 4 VIEJAS TECNOLOGÍAS MÁS RENTABLES
«Todas las cosas exteriores nos someten y esclavizan desde el momento en que las codiciamos»
Epicteto (filósofo griego y esclavo romano, siglo I, Máximas)
He creído y creo ver en las personas la única oportunidad para salvar y mejorar a diario el mundo en el que viven. Creo en las cualidades propias de la naturaleza humana y creo también que debes entrenarlas. Las viejas tecnologías tienen que ver con estas cualidades. Pero en contra de lo que mucha gente cree, para utilizarlas de forma efectiva, deben entrenarse y mejorarse a diario.
Estas son las cuatro viejas tecnologías más rentables que conozco por orden de prioridad:
LA ACEPTACIÓN y EL SENTIDO DEL HUMOR
- ¿Qué genera, crea o posibilita?: Tanto el autoconocimiento (la exploración consciente de lo que uno mismo es) como el conocimiento de la realidad a la que uno pertenece (a exploración consciente de la sociedad, el entorno o el grupo) han sido la base de cualquier progreso humano a lo largo de la Historia. Nadie puede ir a ningún sitio si no acepta lo que es para inmediatamente después aprender a crecer y rebelarse. Nadie. Si no entrenas tu capacidad de aceptación, puede que nunca llegues a ninguna parte porque no tienes ningún lugar del que partir. Como hemos dicho tantas otras veces, aceptarse no es resignarse. La aceptación genera, crea y posibilita el movimiento. Alguien que se acepta, por otro lado, es alguien que no teme reírse de sí mismo y que puede aportar ese gran desatascador de relaciones que es la sonrisa y el sentido del humor, tecnologías altamente valiosas.
- ¿Qué preserva o aumenta?: Para mí la aceptación es una de las diez asunciones básicas para la construcción de criterio y pensamiento propio en la persona. La aceptación de uno mismo y de los demás preserva nuestra especie gracias a mecanismos de interdependencia complejos que conectan con lo racional y lo emocional que hay en nosotros. La aceptación de uno mismo además aumenta la compasión hacia otros, lo que ayuda a la supervivencia de cualquier grupo humano y/o proyecto. El sentido del humor inteligente y respetuoso por su parte prolonga el goce y disfrute de los momentos más placenteros y mitiga el sufrimiento en los momentos de padecimiento o dolor.
- ¿Qué recupera o revaloriza?: Creo que la aceptación pone en valor las relaciones humanas estableciendo posicionamientos sociales (roles) entre las personas. Esto ayuda a establecer responsabilidades desde lo que cada uno es y desde sus compromisos, contribuyendo a recuperar orden, foco y organización en momentos de máxima emergencia. La tecnología de la aceptación además pone en valor el sentido de humildad en momentos clave en los que se han producido escaladas de egoísmo individual o en grupos. Ello favorece el pensamiento altruista y fomenta la supervivencia de los intereses del grupo sobre los intereses de una sola persona.
- ¿Qué reemplaza o deja obsoleto?: La aceptación jubila y deja obsoleta a la también vieja tecnología de la negación. A través de la negación un individuo desentiende su propia realidad o la de otros, lo que genera expectativas imposibles sobre necesidades irreales. Esto se traduce en frustración y desapego. La aceptación reemplaza estos sentimientos por medio del pensamiento racional y la inteligencia emocional. Un ejemplo de cómo pasar de la negación a la aceptación lo tuvimos recientemente en el mundo de las nuevas tecnologías con el caso de Essena O´Neill en instagram. El sentido del humor inteligente evita la pose superficial y el rigor intratable de la seriedad inaccesible de un discurso teórico. El buen humor es sin duda el mejor medio para cualquier fin.
EL DIÁLOGO SIGNIFICATIVO y LA HONESTIDAD
- ¿Qué genera, crea o posibilita?: La honestidad tiene que ver según Confucio con hacer predecibles nuestros comportamientos siendo sinceros y expresando lo que pensamos, y abandonando la pretensión de una gratificación inmediata. La honestidad tiene también que ver con la bondad o la búsqueda de reciprocidad entre personas (justicia) siendo coherentes entre lo que pensamos, decimos y hacemos. Y por último tiene que ver con la autocomprensión previa y la comprensión de los demás, es decir con la aceptación. La honestidad genera y posibilita por tanto la empatía y las relaciones saludables. La honestidad es la base de la inteligencia conversacional y de los diálogos significativos. Partir de la intencionalidad de ser bueno, sincero y útil para mí mismo y para otros es la base de la tecnología del diálogo.
- ¿Qué preserva o aumenta?: Hace tiempo que los chicos del Manifiesto Cluetrain nos enseñar que los mercados y las empresas son conversaciones. La psicóloga y estudiosa de la digitalidad Sherry Turkle reclama el papel de las conversaciones escandalizada por aquello mismo que ella defendía hace 15 años: el papel predominante de una existencia digital (chats, correos, imágenes,…) sobre una existencia real. El diálogo efectivo y real es complejo y suel entrenarlo con alumnos y clientes a diario, pero es tal vez la única garantía de auténticas relaciones humanas y efectivas. Por encima de los debates que ves a diario -lector o lectora- en los medios de comunicación y en los parlamentos, la vía del diálogo y la honestidad garantizan la transmisión de conocimiento y el aprendizaje.
- ¿Qué recupera o revaloriza? El diálogo es la tecnología civilizadora por excelencia. Recupera el valor de las personas y de sus ideas y sobre todo el respeto y el afecto por otras personas e ideas. El diálogo es la base de la convivencia social, y la honestidad que sustenta a los usuarios del diálogo es el ingrediente clave del entendimiento humano y el progreso. Allí donde hay posturas enfrentadas no existe el ánimo por comprender al otro. Allí donde se crean nuevos escenarios a partir de los escenarios propios de cada persona, existe el diálogo.
- ¿Qué reemplaza o deja obsoleto?: La tecnología del diálogo reemplaza al aislamiento y la incomprensión. Es el ejercicio de responsabilidad más completo ya que permite a otros su derecho a ser responsables y promueve una visión integradora e integral del conocimiento humano. El diálogo efectiva también favorece la personalización y el trato humano a las personas, dejando obsoletos los procesos uniformizadores que penalizan las diferencias naturales entre individuos. Todo ello promueve la creatividad y la innovación que son los reemplazos naturales de la reactividad y el conformismo.
EL PENSAMIENTO CIENTÍFICO y EL RAZONAMIENTO LÓGICO
- ¿Qué genera, crea o posibilita?: El pensamiento científico es sin duda una de las mayores conquistas del ser humano y a mi modo de ver complementa a la perfección la visión del saber mítico (o religioso) y el pensamiento cotidiano en aquellos límites en los que estos últimos son insuficientes. El razonamiento lógico desde los antiguos griegos aporta una base sólida sobre hechos observables, ordenando el conocimiento disponible y estableciendo conclusiones a partir de principios y leyes que permiten la toma de decisiones. Impide a la mente humana contentarse con atajos y la entrena en el ejercicio de la plena responsabilidad sobre los actos.
- ¿Qué preserva o aumenta?: Favorece el pensamiento crítico por su naturaleza reflexiva. Aumenta la predictibilidad de los acontecimientos dando a las personas seguridad en su vida diaria. Aumente el número de certezas básicas de las personas hasta que no se demuestre lo contrario y favorece el entendimiento colectivo por encima de las diferentes culturales o prejuicios individuales.
- ¿Qué recupera o revaloriza?: Recupera una visión conjunta sobre el medio o el método a seguir por varias personas o grupos con el fin de explorar una realidad compartida. Revaloriza la toma de decisiones y el apego a la realidad inmediata, lo que pone en valor a su vez las experiencias que vivimos a diario y las conclusiones que establecemos a partir de esas experiencias. Además la argumentación y el razonamiento lógico (incluyendo la comprensión científica de nuestras emociones e inteligencias) favorecen el trabajo en equipo y la consecución de resultados.
- ¿Qué reemplaza o deja obsoleto?: La tecnología de la razón y el pensamiento científico dejan obsoletas algunas creencias limitantes que tienen que ver con la exclusión o la particularidad de grupos de personas. En particular me refiero a los prejuicios de tipo sectario y no integrador. Creo que además el pensamiento científico y la razón humana son un gran complemento a los usos, ideas, hábitos y costumbres (cultura) ajenos a efectos de su comprensión y contextualización.
EL PENSAMIENTO ESTRATÉGICO y LOS SISTEMAS DE GESTIÓN
- ¿Qué genera, crea o posibilita?: En cada propuesta que elaboro para mis clientes incluyo esto: «Hace ahora unos años Gary Hamel ideó junto a otras buenas eminencias del management, el proyecto Management Innovation eXchange, una de las más ambiciosas apuestas para reinventar el concepto de la ciencia de la gestión en el siglo XXI. Este proyecto propone 12 áreas de cambio y parte de dos afirmaciones: la primera de ellas era que el mayor avance tecnológico de la humanidad son los sistemas de gestión; la segunda de ellas era que estos modelos deben reinventarse para asumir nuevos retos.» Los sistemas de gestión representan la forma de relación humana más productiva en términos cualitativos y cuantitativos inventada hasta la fecha. Han hecho posible que nos organicemos para que tener una higiene, una salud y una calidad de vida dignas en muchas partes del planeta. Son también generadores de algunas desigualdades internas de las organizaciones y entre diferentes regiones del planeta. Mi foco profesional consiste en trabajar para generar sistemas de gestión que posibiliten el desarrollo humano saludable dentro de las organizaciones. Muy ligado a los sistemas de gestión se encuentra la estrategia o el modo en el que logramos nuestros objetivos
- ¿Qué preserva o aumenta?: Toda persona necesita una estrategia para ser aplicada consciente o inconscientemente consigo mismo o con otros. Llamo pensamiento estratégico a la forma consciente en la que las personas somos capaces de favorecer la obtención de buenos resultados a partir de una toma de decisiones fundada y realista. Es por ello que el pensamiento estratégico, bien ejecutado, aporta satisfacción y realización a las personas y un horizonte o una meta, algo así como un reto y un sentido de existencia o trabajo. No es poco. Por su parte los sistemas de gestión -muy ligados a la estrategia relacional- aportan una estructura comprensible a las personas para poder lograr y trabajar por ese reto o sentido. Creo que tampoco es poco.
- ¿Qué recupera o revaloriza?: A nivel social, tanto los sistemas de gestión como el pensamiento estratégico son el pegamento de cualquier sociedad. Ha evolucionado a lo largo de la Historia desde el gobierno de unas pocas personas en la cultura tribal hasta el gobierno global y local de 7.000 millones de personas con comportamientos humanos interdependientes pero con una misma filosofía compartida y fines vitales similares: supervivencia, desarrollo y convivencia. A nivel individual, el pensamiento estratégico promueve tanto la aceptación, como la honestidad y el pensamiento crítico.
- ¿Qué reemplaza o deja obsoleto?: Los sistemas de gestión más avanzados (últimos 200 años) evolucionaron las viejas estructuras escolásticas o tribales basadas en la supremacía y el dominio de las castas por derecho, dando paso a una cultura del control a través de la disciplina. La mayoría de modelos con los que trabajo en la actualidad han evolucionado desde esos modelos a modelos centrados en las personas y en la generación de una cultura del esfuerzo y el respeto mutuo. Voces como la de Byung-Chul Han alertan sobre un nuevo peligro que utilizaría nocivamente este esfuerzo lícito que hacemos muchos para mejorar los sistemas de gestión. Según él y otros autores en la actualidad se estaría produciendo un nuevo control a través del rendimiento. Este nuevo paradigma estaría basado en el fomento de la positividad absoluta y la superación trasladando la responsabilidad plena del éxito a cada individuo y no a su contexto por medio de nuevos modelos de presión. Esto equivaldría a pasar de una sociedad del «no se puede hacer esto» a una sociedad ridícula del «tú puedes con todo». Creo que algo de esto se está produciendo en algunas organizaciones con las que colaboro, forma parte de mi responsabilidad y de la tuya contrarrestar esta tendencia happy flower.
Creo sinceramente que si eres capaz de cuidar y entrenar estas 4 viejas tecnologías, tanto como de rodearte de gente que las cuide y las entrene, tus posibilidades de éxito y realización serán enormemente grandes.
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